viernes, 25 de marzo de 2016

TUBERCULOSIS EN EL PERÚ

“Las historias sobre la desigualdad de ingresos, que afecta a la salud, son más fuertes que la evidencia” - Angus Deaton, Premio Nobel de Economía 2015.

Martín Rivas.- En el marco de las celebraciones por el Día Mundial de la Tuberculosis, es conveniente hacernos algunos cuestionamientos (tanto como país y también, lógicamente, como sector salud) sobre la situación actual de la Tuberculosis-TB en el Perú: ¿Cómo estamos? ¿En qué hemos avanzado? ¿Qué propuestas se están planteando, para los próximos años en la lucha contra la Tuberculosis? 

La Tuberculosis (TB) en el Perú y el mundo, tiene un rostro social, tiene una explicación más compleja que sobrepasa los límites del enfoque recuperativo de la enfermedad. Su génesis está más relacionada con el desarrollo de inequidades sociales desarrolladas en el tiempo, perpetuadas por un círculo vicioso transgeneracional, en donde los pobres continuarán siendo pobres. El resultado de estas injusticias, no permite ejercer el derecho a salud plena de las personas en general, haciéndolos más susceptibles y vulnerables. 

De acuerdo a la información reportada en la Web de la Estrategia Sanitaria Nacional de Prevención y Control de Tuberculosis del MINSA, ESNPCT - MINSA, el número de casos nuevos de TB en el año 2014 fue de 27, 258 casos (Tasa de 87.5 x 100,000 hab.) y el número de casos por todas las formas de TB fue de 31,461 casos (tasa de 102.1 x 100,000 hab.). Estos datos comparados, con los de los últimos 5 años, nos muestran una disminución de la morbilidad por TB del 2,7%, esto no ha sido suficiente, ya que estas cifras son, aún, elevadas en comparación con otros países de Latinoamérica, ubicándonos en los primeros lugares, junto con Haití y Bolivia, situación que no se ha revertido desde la década de los 80´s, a pesar del período de “gran crecimiento económico” que no ha sido aprovechado adecuadamente para superar este grave problema de salud pública. 

En nuestro país el gasto público en salud se ha incrementado ligeramente en los últimos años, 2.09% del PBI para el presente año (0,36% de incremento con respecto al año 2015, aunque sigue siendo el más bajo de la región), ello, en cierto modo, ha posibilitado el incremento del presupuesto para TB, Presupuesto por Resultado-PpR PP 016 TB, con un incremento de más del 400% en los últimos 5 años (de 56 millones de soles en el 2010 a 240 millones de soles en el 2014), sin evidencias significativas de mejoras. Dicho presupuesto ha sido destinado, en su mayor parte, a la detección precoz y al tratamiento de los casos de TB en todas sus formas, esto en definitiva constituye solo algunos aspectos de dicho problema de salud, dejando de lado el enfoque integral e intersectorial de abordaje que tiene que ver más con el enfrenamiento de los Determinantes Sociales de la TB. 

A finales de diciembre del 2015, The Lancet Infectious Diseases publicó los resultados de una investigación (pueden acceder en: http://dx.doi.org/10.1016/S1473-3099(15)00401-6 ) que analiza una relación entre el gasto en protección social y la incidencia, prevalencia y mortalidad por TB. Se utilizan los datos sobre morbilidad y mortalidad del Programa Mundial contra la Tuberculosis de la OMS (años 2000-2012) y de protección social de la Organización Internacional de Trabajo (OIT) que están expresados en porcentaje del PBI. Dicho estudio permite evidenciar, una clara y sugestiva, relación inversa entre el nivel del gasto en protección social y la carga por TB, por ejemplo con un gasto del 1% del PBI destinado a la protección social, la incidencia, prevalencia y mortalidad varía en: - 8.16, -18.33 y -5.48 x 100,000 hab. respectivamente. 


Figure 1 Levels of social-protection spending as a percentage of national gross domestic product. Levels of social protection exclude health spending. The latest year of available data was used for each country. Tomado de: http://dx.doi.org/10.1016/S1473-3099(15)00401-6
En nuestro país según información disponible de la Ley de Presupuesto Público del año 2015 y 2016, el gasto social (que incluye gasto en educación, salud y protección social) correspondió al 6.7% del PBI, siendo el gasto en protección social de 0.9% del PBI. Para el presente año representa el 6.8% (0.88% del PBI de gasto de protección social). Si relacionamos los hallazgos y planteamientos de la presente investigación y hacemos algunas inferencias, el porcentaje del PBI que el Estado destina exclusivamente a la protección social es insuficiente para los efectos de reducción de la morbimortalidad por TB. 

Figure 2 Bivariate association between social protection and tuberculosis prevalence, incidence, and mortality. Colours represent World Bank income group and the size of the circle for each country is set to the square root of 2013 case notifications of tuberculosis. Brazil, Russia, India, China, South Africa, France, USA, and Indonesia are labelled to emphasise variations. The latest year of available data was used for each country. GDP=gross domestic product. Tomado de: http://dx.doi.org/10.1016/S1473-3099(15)00401-6
La protección social incluye la reducción de la exclusión social y de la vulnerabilidad de las personas frente a los problemas de salud, por ejemplo. De otro modo, con el incremento del gasto en protección social, se permite garantizar mejores condiciones de supervivencia de las personas en situación de pobreza y pobreza extrema, de esta manera se reduce su vulnerabilidad y desprotección ante la presencia de problemas de salud. Cabe añadirse, que el gasto social no va generar en si una respuesta de impacto en la resolución definitiva del problema de TB, si no existe una articulación de los esfuerzos en pos de un objetivo común y esto pasa por la cuestión de reinsertar el enfoque de intersectorialidad así como revalorar la tesis de que casi todos los problemas de salud están generados por los determinantes sociales. 

Finalmente, la propuesta va más allá de implementar el enfoque recuperativo de la enfermedad, el cual erróneamente se está considerando de manera sistemática y muy en particular en enfermedades que tienen alta connotación social como es el caso de la TB, es acertado concluir que existe una urgente necesidad de replantear el accionar del Estado y del Sector Salud, principalmente, en la lucha contra la TB. Se ha conseguido mejorar el diagnóstico (con técnicas modernas y novedosas) y el tratamiento (acercando y facilitando más el acceso de medicamentos al paciente), pero ello no será de impacto si en los próximos días, probablemente, otras personas en situación de injusticia social ya se contagiaron y comenzaron a desarrollar la enfermedad. Momento de reflexionar y plantearnos nuevos caminos para no obtener los mismos resultados lamentables siempre.

domingo, 20 de marzo de 2016

SALUD MENTAL Y ELECCIONES 2016

SALUD MENTAL Y ELECCIONES 2016

Juan Carlos Ocampo.- Es evidente que un contexto de elección política despierta inusitados intereses por diversas problemáticas y la Salud no escapa de esa coyuntura. El presente proceso de elecciones se presenta incierto a tres semanas de las elecciones, como también incierto es, qué medidas políticas tomaran nuestros futuros gobernantes en temas de Salud y específicamente en Salud Mental.

En ese contexto, el día 17 de marzo de 2016, la Pontificia Universidad Católica (PUCP) convocó a los representantes  de los partidos políticos candidatos a las presentes elecciones generales,  en la Facultad de Psicología,  para presentar  las propuestas de los planes de gobierno de sus respectivas organizaciones políticas para afrontar la problemática de la Salud Mental en el Perú. Estas son algunas de las conclusiones de dicho evento:

1) Los organizadores informan verbalmente que el representante de FUERZA POPULAR,  Dr. José Recova Martínez, indica  que NO  PARTICIPA en el evento por cuestiones de trabajo.

2) El representante del APRA no responde a la invitación que realiza la organización del evento  para tratar la problemática de Salud Mental por lo que NO PARTICIPA.

3) Los organizadores informan que no invitaron a otras agrupaciones por criterio de priorizar a las agrupaciones políticas que tienen posibilidades de ganar las próximas elecciones presidenciales y legislativas.

4) Acude a este evento el Dr. Yuri Cutipe representante del Ministerio de Salud quien informa la problemática y labor realizada en la Salud Mental por el sector Salud. Afirma que los cuidados de la Salud Mental desde el Estado todavía es precario, las brechas de la atención están en alrededor del 89%, siendo una de las brechas más altas de América Latina, pese a representar la mayor CARGA DE ENFERMEDAD los trastornos neuropsiquiatricos, especialmente la depresión, los trastornos por consumos de sustancias,  etc. La calidad de atención está marcada por el modelo de atención, que en el Perú es un modelo todavía “hospital-céntrico” especializado que se “híperconcentra” en Lima. Por lo que tenemos el reto de configurar, descentralizar y expandir los servicios en Salud Mental.